Contralor del estado se deslinda de los implicados en el destrucción de las piezas arqueológicas de la Cultura Olmeca

* El funcionario se declaró un profesante de la iglesia Nueva Generación, sin embargo, dijo que no tuvo que ver para la liberación de vándalos que dañaron el patrimonio nacional

* Alude a su involucramiento a un "juego amigo" de cara a los tiempos electorales

Redacción

Acento

A pesar de que reconoció ser miembro de la asociación religiosa “Nueva Generación”, el contralor del estado de Tabasco, Roger Silviano Pérez Evoli, se deslindó de los señalamientos que lo relacionan con la rápida liberación de los tres sujetos pertenecientes a esta congregación que el pasado domingo dañaron 23 de las 33 piezas arqueológicas de la Cultura Olmeca que se exhiben en el parque Museo La Venta.

Entrevistado en un conocido medio radiofónico de la entidad, el funcionario consideró que los señalamientos en su contra podrían venir de “fuego amigo”, ante la cercanía de los lineamientos del PRI para seleccionar a sus candidatos a competir en el proceso electoral federal.

“yo tengo años de acudir a esta iglesia, y jamás he visto, jamás me han inculcado este tipo de acciones de vandalismo y de este tipo de situaciones. Tengo un ejemplo muy claro de los líderes de la iglesia del respeto a todas las instituciones, puedo yo pensar de que se trata de los últimos días, pues no solamente por la radio, por la televisión he recibido muchos tipos de ataques y de ofensas”, comentó.

Cuestionado sobre si conocía a los vándalos, el funcionario indicó que no alegando que a esta “iglesia” llegan más de 6 mil personas.

“Si algún miembro comete un ilícito, pues no puede ser responsable directo la iglesia, eso no es lo que a nosotros nos inculcan…aquí nos inculcan la paz, el amor, la unidad familiar, el respeto a la palabra de Dios”, arremetió.

Cabe destacar que mientras el funcionario dijo no conocer a como miembros de su iglesia a Roberto Conde Díaz, José Pablo Mejeres Jasso y Wanda I. Aguilar, en un comunicado de la asociación religiosa reconocen a uno de los vándalos como integrante de su organización, aunque se deslindaron de los hechos al señalar que “es una iglesia pacífica cuya doctrina y liderazgo no comulgan con la destrucción del patrimonio nacional, ni de los bienes muebles e inmuebles de terceros”.